Estrés

El estrés es una demanda física o psicológica que sobrepasa las capacidades de adaptación de la persona, provocándole una respuesta de ansiedad cronificada en el tiempo y con reacciones psicosomáticas o incluso trastornos psicológicos.

La persona que lo sufre presenta diversos síntomas, entre los frecuentes están:

    • Ansiedad,
    • Sensación de ahogo,
    • Rigidez muscular,
    • Pupilas dilatadas,
    • Incapacidad de conciliar el sueño (el insomnio),
    • Falta de concentración,
    • Irritabilidad,
    • Pérdida de las capacidades para la sociabilidad, entre otros sintomas…

Hay muchos factores que pueden desencadenar el estrés (“ estresores” ), los más frecuentes son:

    • Las situaciones que obligan a procesar la información al instante (trabajo bajo presión,…),
    • Las percepciones de amenaza (de pérdida de trabajo, crisis económica, entorno de violencia,...)
    • Los estímulos ambientales dañinos (ruidos, contaminación…),
    • La alteración de las funciones fisiológicas (como las enfermedades o las adicciones),
    • El aislamiento social (soledad, cambios de residencia,...),
    • La presión grupal (diferentes formas de acoso,...),
    • La frustración.